duelos

DESPUÉS DE UN TIEMPO
Después de un tiempo,
uno aprende la sutil diferencia entre sostener una mano y encadenar un alma,
y uno aprende que el amor no significa acostarse
y una compañía no significa seguridad y uno empieza a aprender…
Que los besos no son contratos y los regalos no son promesas
y uno empieza a aceptar sus derrotas con la cabeza alta y los ojos abiertos
y uno aprende a construir todos sus caminos en el hoy,
porque el terreno de mañana es demasiado inseguro para planes…
y los futuros tienen una forma de caerse en la mitad.
Y después de un tiempo uno aprende que si es demasiado,
hasta el calorcito del sol quema.
Así que uno planta su propio jardín y decora su propia alma,
en lugar de esperar a que alguien le traiga flores.
Y uno aprende que realmente puede aguantar,
que uno realmente es fuerte, que uno realmente vale,
y uno aprende y aprende… y con cada día uno aprende.
(Borges)


CUANDO NO NOS QUIEREN
¿Por qué seguimos en una relación insana, a sabiendas de que no nos aman? Esperar a que te quieran puede ser una de las experiencias más humillantes y tristes: "Ya no me abraza, ya no se preocupa por mí" o "Nunca me he sentido realmente amada o amado". ¿Qué esperas, entonces?Mendigar amor es la peor de las indigencias, porque lo que está en juego es tu persona, y si el otro, el que está por "encima", acepta dar limosnas, no te merece.
¿Quién tiene el poder en una relación? No es el más fuerte, ni el que tiene más dinero, es el que necesita menos al otro. Si tu pareja puede prescindir de ti mucho más fácil de lo que tú puedes prescindir de él o ella, hay que equilibrar la cuestión. Una persona honesta jamás estaría con alguien a quien no ama para aprovecharse de ciertos beneficios, llámese comodidad, dinero, compañía, etcétera.
Si no te quieren, no es negociable. ¿Qué vas negociar, qué acuerdos vas a. proponer si no hay sentimiento, ni ganas ni deseo? ¡Que mala consejera puede ser a veces la esperanza!
Si bajara un ángel y te dijera que tu pareja nunca podrá amarte de verdad, por lo menos como te gustaría, ¿seguirías manteniendo la relación? ¿Qué harías? Para mi es claro que si alguien titubea o duda de que me ama, no me ama. "Dame un tiempo", "Déjame pensarlo" o "No estoy seguro": excusas o mentiras.
Si es evidente que no te quieren y sigues allí a la espera de ¡a resurrección amorosa, dispuesta o dispuesto a responder a cualquier insinuación, te extralimitaste: estás del otro lado. Y si tu sensación de insatisfacción afectiva persiste a pesar de tus justos reclamos, ya tienes resuelto el problema. No hay dudas: no te aman, y entonces sólo queda irse.... (Walter Riso)


EL AMOR INMADURO
Muchas personas se toman la vida de manera muy pasiva, aunque superficialmente puedan dar otra imagen. En lo más hondo siguen esperando que las rescaten, que les digan que son buenos chicos o buenas chicas, que alguna fuente externa los valore o los justifique. Así es cuando organizan sus vidas en torno al deseo de agradar, de que les cuiden o por el contrario de dominar, manipular y forzar la satisfacción de sus necesidades y deseos, porque no confían en la autenticidad del amor ni creen que lo que son, sin fachadas, sea bastante. Tanto si sus acciones se centran en verse impotentes, en ser dependientes, o por contra en controlar, sobreproteger o ser responsables de otros (como en parte me pasa a mí) sienten el mismo vacío. Nunca han alcanzado y asimilado la soledad y no han alcanzado la individualización en el grado adecuado.
Las personas inmaduras tienen tendencia a considerar a los demás como la fuente de gratificación de sus propios deseos y necesidades. Por lo tanto sus relaciones tienden a ser dependientes y manipuladoras, no como el encuentro de dos seres autónomos que se sienten libre para expresarse sinceramente y apreciar y disfrutar la personalidad del otro, sino más bien como la relación de dos seres incompletos que ven el amor como el remedio de sus deficiencias internas. Tienden a convertir el amor en un sustituto de la evolución hacia la madurez y la autorresponsabilidad ¿Pero cuántos de nosotros somos del todo así, completos?
Una mujer inmadura contempla a su pareja y dentro de su subconsciente nace la idea... "mi padre me hizo sentir rechazada... tú ocuparás su lugar y me darás lo que él no supo darme... yo construiré un hogar para ti... te haré la comida, criaré a tus hijos... seré tu niña buena..." O pongamos que una mujer se siente no querida por uno o los dos progenitores... dentro de ella se forja la herida, el autorrechazo, pero bajo una apariencia de madurez... y se enamora de un hombre que comparte características con el padre o madre que la rechazó... quizás sea frío, falto de emotividad... y como un jugador que ha perdido ella vuelve a sentarse a la mesa donde sufrió sus derrotas con la idea impulsiva de que esta vez no perderá... Lo que no se dan cuenta es de que aquellos hombres serán meramente útiles, instrumentos válidos para volver a su pasado.
En cierto sentido podemos decir que una característica del amor inmaduro es que el hombre o la mujer no es capaz de percibir a su pareja de forma realista, y sustituye esta visión por fantasías y proyecciones. Y es muy probable que estas personas inmaduras contacten con otras que también lo sean. Un hombre que siente la necesidad de jugar el papel de fuerte, protector, responsable, alguien que controla la situación encontrará a una mujer que sentirá el deseo de jugar a ser débil, indefensa, dependiente, infantil. A veces el amor nace de esas diferencias complementarias, pero es una auténtica bomba de relojería... A pesar de que estas relaciones tienden a ser inestables, a no durar, a explotar o apagarse, a veces manifiestan todas las características de una adición. La autoestima de los participantes depende hasta tal punto del respaldo y la confirmación de su pareja, que incluso las ausencias más breves son capaces de motivar la ansiedad, pánico o desespero.
Por eso para que pueda darse la existencia de un amor maduro ambas personas deben considerarse responsables de sus acciones y de sus deseos. Tener autoestima y autonomía son fundamentales para nuestro desarrollo y el desarrollo de un amor responsable y adulto. Ahora me toca a mi acabar con mi faceta de sobreprotección... empecemos a cambiar roles...